La automatización de pagos: ¿Una alternativa a los POS?
Para consumidores y también para empresas, el uso de la tarjeta de crédito para hacer y recibir pagos actualmente puede representar una pérdida de tiempo. Estamos en una era de eficiencia, buscamos y valoramos servicios y productos que hagan que nuestros días sean más productivos. Por ello, se hace necesaria la automatización de pagos.
Hoy en día, es muy normal que las personas utilicen tarjetas de crédito en lugar de efectivo para hacer los pagos de servicios. Muchas personas andan con el mínimo de efectivo en sus billeteras, y se acostumbran a usar el plástico para comprar desde un café hasta pagar la remodelación completa de su hogar. Incluso, es cada vez más común usar las tarjetas de débito y crédito para hacer pagos de servicios mensuales como luz, teléfono y seguros. ¿Existe una alternativa al uso de los point of service (POS) para hacer pagos sin el uso de efectivo? Algunos expertos consideran que la automatización de pagos podría ser el siguiente paso en el mundo de lo pagos electrónicos. ¿Podría ser una alternativa a los POS?
¿Qué es la automatización de pagos?
La automatización de pagos es una tecnología financiera (Fintech), que permite las ventas y cobros por medio de “chatbots” en redes sociales y WhatsApp. Ya que, por lo general, la automatización utiliza plataformas de inteligencia artificial, aprende ciertos patrones y mejora en su atención cada vez que es utilizada.
Además, permite a las personas hacer negocios e intercambios de servicios y productos por dinero sin tener que estar en el mismo sitio.
¿Cómo se compara con los point of service?
Con los POS, es necesario tener un intercambio personal, ya que el cobro sólo se puede hacer por medio de la máquina. En términos de costos para la empresa, la inversión para mantener un POS es mucho más alta. Además de la tarifa estándar que se le cobra al usuario de parte de la empresa que provee el POS, el negocio también debe cubrir el costo de las horas invertidas de parte del personal para recibir y verificar los datos. La empresa debe contratar a una o varias personas para encargarse de ese cobro. Aparte, a pesar de que el personal en puntos de pago debe solicitar identificación para poder utilizar tarjetas, muchas veces no lo hacen. Esto abre la posibilidad de que alguien utilice una tarjeta robada en varios establecimientos antes de que el verdadero dueño se dé cuenta. Además, aún si se solicita identificación para poder utilizar la tarjeta, siempre hay riesgo de clonación del chip e impresión de la copia con otro nombre.
¿Cuáles son las ventajas de la automatización de pagos?
Según Steven Cremer de Júpiter Tech y Págalo, dos servicios integrados de pagos automáticos, hay dos claras ventajas de la automatización de pagos.
- “Podemos habilitar un negocio en un día, cualquier persona puede cobrar, desde cualquier parte”.
- “Es importante saber que es más seguro procesar en línea que un POS inalámbrico”. Otros beneficios de los pagos automatizados incluyen: Reducción del gasto en tiempo del personal usado en cobrar por medio de POS.
- Los costos de los servicios pueden ser mucho más asequible dependiendo de la plataforma seleccionada. Por e-commerce, por ejemplo, el servicio para MIPYMES puede ser tan bajo como de $45 mensuales.
- Facilita la liquidación de fondos de alto valor.
- Permite una fiscalización más fácil y rápida.
-
Aunque la automatización de pagos no parece tener límites de aplicación, lo más probable es que no reemplace por completo a las transacciones personales, sea en efectivo, cheque o POS. Aparte de las personas que no confían en las transacciones electrónicas, existen clientes que aún no están vinculadas al sistema bancario. Estas personas siempre van a realizar transacciones en persona. Esta probablemente será la realidad en el futuro cercano. Sin embargo, no hay duda de que el crecimiento de la automatización de pagos apenas está empezando y los más ambiciosos no le ven límites a su aplicación.
También te recomendamos leer:
Etiquetas Populares :
Joseph J. Solis
Otros artículos de interés:
Pago de cheques con tecnología blockchain en Ecuador
¿Qué es el Open Bank Project y cómo las APIs abiertas están cambiando a la banca?
La importancia del edge computing para la banca
Suscríbete al blog de Cobis.
Recibe las últimas noticias sobre innovación financiera.
Los más leídos
Categorías
- 2020
- Agile
- agilidad financiera
- analitica
- Artificial Intelligence
- Atención al Cliente
- automation
- automatización bancaria
- AWS
- banca
- banca digital
- banca inteligente
- Banca Internet
- banca movil
- Banca Móvil
- banca verde
- bancarizacion
- banking customer
- big data
- Bitcoin
- Blockchain
- Canales Bancarios
- ciberseguridad
- Clab
- cloud
- Cloud Banking
- colombia
- comercio electrónico
- Cooperativas y SOFIPOS
- Core Bancario
- covid-19
- credit services
- criptomonedas
- crédito
- Cultura COBIS
- data
- Data Management
- DevOps
- Digital Bank
- Digital Banking
- Digital Finance
- Dinero electrónico
- disrupción bancaria
- ecommerce
- Eventos
- experiencia bancaria
- financial technology
- Financial Trends
- Fintechs
- inclusion financiera
- Inclusión Financiera
- Innovación
- Innovación Bancaria
- Innovación Financiera
- inteligencia artificial banca
- Internet Banking
- Movil
- mujeres
- neobancos
- nube
- nube híbrida
- Open Banking
- P2P
- Pagos
- pagos online
- Paperless
- Prestamos
- prestamos digitales
- Project Pulso
- protección de datos
- préstamo
- regtech
- regulación bancaria
- Seguridad
- Seguridad Bancaria
- Serverless
- servicio al cliente
- Servicios
- soluciones en la nube
- Tecnología Bancaria
- usuarios
- womenintech
- ver más
Autores
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Mayra Alves
- Mayra Alves
- Mayra Alves
- Mayra Alves
- Mayra Alves
- Mayra Alves
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Mayra Alves
- Mayra Alves
- Catalina Arango Bedoya
- Mayra Alves
- Mayra Alves
- Catalina Arango Bedoya
- AWS
- Mayra Alves
- Catalina Arango Bedoya
- Mayra Alves
- Catalina Arango Bedoya
- Mayra Alves
- Catalina Arango Bedoya
- Mayra Alves
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Flávio Gaspar
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Catalina Arango Bedoya
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Pablo Villacís
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Cobis Topaz
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Cobiscorp
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo
- Diana González Fajardo